La electrónica para motores de corriente continua tiene como función principal el control de la velocidad o el par según las variaciones de carga del motor. Para conseguir esto el valor de la consigna (velocidad deseada) se compara continuamente con la velocidad real. La diferencia se aplica al motor a través de la etapa de potencia. El valor de la consigna se introduce en la tarjeta mediante una tensión analógica o un potenciómetro.